La relación entre niños y abuelitos continuó cuando visitamos en dos ocasiones a nuestros abuelitos llevándoles con cariño el fruto de nuestras campañas, nuestras canciones y un poco de dulces para compartir. Este año, con motivo de la semana Champagnat iniciamos la campaña solidaria para nuestros abuelitos juntando más de una docena de frazadas formados por cuadrados de lana tejidos con amor por nuestras mamás. La participación de nuestras familias fue entusiasta. Finalmente se reunieron niños y adultos para dar un saludo a nuestros amigos llevándoles nuestras frazadas, nuestra alegría y fe. Los niños invitaron a los abuelitos a una oración a través de la cual agradecieron a Dios por este encuentro y encomendaron a los abuelitos al amor de Dios, a la protección del abandono, y de la enfermedad. Entre lágrimas por las peticiones espontáneas de nuestros niños nos despedimos de nuestros amigos anunciando una próxima visita. Agradecemos la participación alegre y comprometida de nuestras mamás encargadas de pastoral y de aquellas que se animaron en la campaña.