Con nuevo look celebran las históricas figuras de yeso los 35 años de nuestra historia, y todo gracias a un proyecto del área de Evangelización y realizado por la artista Julia Polanco.

Estas esculturas y estatuas habían sufrido el paso del tiempo: descascarándose, perdiendo los colores y asi de a poco, la vida. Pero un aire fresco llegó a rescatarlas y hoy muestran sus virtudes nuevamente, para acercarse a los más pequeños de nuestro colegio, acompañarnos en nuestros ritos religiosos y ser presencia de Dios en nuestras salas. 

Entre las restauraciones más significativas se encuentra nuestra Buena Madre. Estatua de un metro y veinte centímetros, que tenía destruidas sus manos y base, y que gracias a la colaboración de apoderados, hoy volvió a estar completa y firme. Sus colores nos invitan a acercarnos a María y pensar en ella. 

Este primer proyecto de restauración histórica se llevó a cabo desde abril de este año y contempló 5 elementos. Te invitamos a descubrir sus nuevos colores y cuidarlas, que nuestra historia está vida en todos lados.