Fue durante todo el mes de enero, que trabajo con niños de escasos recurso en Florianópolis, en (Colonias de Férias) Colonias de vacaciones.
Trabajo realizado en instituto CEDEP, donde asisten 100 niños aproximadamente. Convivio con los Hermanos Marista del Morro de Monte Serrat. Hermano Neri y Adriano y Padre Vilson.
Además de compartir con voluntarios universitarios de diferentes países de Latinoamérica.
La entrega y el amor y por sobre todo el cariño de los niños hacia una persona extranjera, no importo la barrera del idioma, la estadía, y el largo viaje que debía realiza todos los días de un extremo a otro, cruzar de la isla al continente, salir de un morro y llegar a otro, no tiene precio.
Conocer costumbre, idiomas, cultura es impagable y por sobre todo el trabajo con los niños.
Y sobre todo, sentir la presencia Marista y el carisma es algo imposible de explicar, se siente, se vive, Marcelino y la Buena Madre cruza fronteras.
Manifestó, agradecer a su familia que parte fundamental de su voluntariado, a Dios y a todas las personas que la acompañaron en esta hermosa experiencia, que recomendó 100% a vivir.
Uno crea redes y sobre todo deja huella, que se hacen camino al andar. Y que Dios pone a las personas indicadas en el momento indicado.